Semana Santa

Es Semana Santa. Las calles de Sevilla desbordan de gente viviendo su pasión cofrade y las playas cercanas de quienes huyen de la multitud.

Estoy sentada frente al ordenador, fuera de mi casa, buscando un poco de silencio y tranquilidad. Para mí no es tiempo de religión, ni de fe, ni de vacaciones (aunque mi escuela de teatro no imparta clases).

Estoy trabajando y estudiando, queriendo completar mi titulación en Biodanza. Para la presentación de mi monografía final me piden un minucioso análisis y justificación teórico metodológico de la intervención que realicé.

Entre libro y libro, entre cita y cita, organizo trabajo de La Barca y tomo unos cuántos mates.

Ayer me dieron las once de la noche aquí, frente al teclado.

A veces me pregunto cómo es que se llega a pensar que la Biodanza es flipada, o que puede tomarse meramente como una actividad de ocio y desconexión.

La profunda tarea de renovación orgánica, de educación motora, de reaprendizaje afectivo que se realiza la biodanza, promoviendo el bienestar psicofísico es de las más completas que existen.

Ayer me dieron las once de la noche aquí, ser facilitadora de biodanza titulada es un camino intenso.

Sigo caminando, mientras el sol baña la playa y se refleja en un paso de palio.

Patricia Davis

Patricia Davis

Llevo más de 25 años trabajando con grupos, focalizada en el desarrollo tanto a nivel personal como grupal y comunitario.