No tienes que empezar sabiendo
No tienes que empezar sabiendo. (Aunque sabes mucho más de lo que crees). Cada vez es más la gente que se preocupa porque cree que tiene que llegar a los cursos sabiendo.
No tienes que empezar sabiendo. (Aunque sabes mucho más de lo que crees). Cada vez es más la gente que se preocupa porque cree que tiene que llegar a los cursos sabiendo.
Estar al tanto de lo que pasa en el mundo, y en el país, la ciudad, el barrio. Asistir a la desigualdad, la alienación, la deshumanización, y todos sus etc.
El arte ha sido siempre mi tabla de salvación, refugio, nutrición, esperanza, explicación y aliento. Belleza entre la mierda, pura. En la alegría, la angustia, la euforia, la desolación o la nada.
Estoy sentada frente al ordenador, fuera de mi casa, buscando un poco de silencio y tranquilidad. Para mí no es tiempo de religión, ni de fe, ni de vacaciones (aunque mi escuela no imparta clases).
«La gente que viene a La Barca es muy linda» suelen decirme. A lo que siempre respondo: – «La gente es linda, pero hay que dejarla en paz y darle la oportunidad de ser su mejor versión».
Puse un pedacito de mi corazón en juego, sin ningún personaje ni dramaturgia. Las personas asistentes me recibieron maravillosamente.
La Biodanza propone desarrollarnos desde la vivencia, es decir, qué no necesito mientras la vivo, dedicarme a «entender» si no a estar, a sentir.
¿Sientes que la desmotivación está copando gran parte de tu rutina?, ¿quisieras realizar actividades físicas pero no terminas de encontrar tu lugar?
¿Qué es el éxito? ¿Todo el resultado depende de mí? A veces no. Puede que haga lo mejor posible y aún así no lo consiga. O no lo consiga hoy.
¿Qué valor pueden tener mis reflexiones? Son una visión inacabada, sesgada, subjetiva. Están completamente atravesadas por mi vivencia y por mi mirada.